Parroquia de Santa Mª de los Ángeles (Franciscanos)
EDIFICACIÓN RELIGIOSA
Parroquia de Santa Mª de los Ángeles (Franciscanos)
c) Perines 5
Luis Alústiza Garagalza
R.R.P.P. FRANCISCANOS/1966
Silvia Cruz Tomás
En esta época se produce un fenómeno en la arquitectura religiosa y es la voluntad de participar de la modernidad. Los nuevos materiales ofrecen numerosas posibilidades de adaptaciones en planta liberando espacio y permitiendo plantas libres con las que poder innovar en su disposición.
El conjunto está formado por una iglesia, un convento y una residencia de estudiantes. La iglesia la forman 3 plantas sobre las que reposan 4 más correspondientes al resto del conjunto.
Para el proyecto el arquitecto Luis Alústiza contaba con una parcela rectangular que daba a dos calles paralelas en sus frentes menores. Por un lado a la calle Perines y por el otro a la calle de los Indianos. Los lados mayores de la parcela correspondían a las medianeras de las viviendas que ya ocupaban parte de una manzana.
La estructura de la iglesia está compuesta de rotundos pórticos de hormigón armado de gran sección que permiten dejar la planta libre en la zona de liturgia y ordenan el espacio. En total ocho pórticos paralelos a las fachadas que lindan con las calles, cuya crujía central es casi el doble que las demás.
Los accesos al edificio se realizan desde ambas calles y están colocados en la misma posición, creando un recorrido longitudinal que sigue un eje. La zona de liturgia se coloca perpendicular a los accesos, en la zona central de la medianera norte coincidiendo con la crujía mayor. El presbiterio se eleva sobre tres peldaños semicirculares y se apoya sobre un chapado de mampostería para focalizar su atención. Para reforzar la atención se abren unos huecos en el techo de la crujía central para conseguir una iluminación cenital y se orienta el mobiliario compuesto por cuatro filas de bancos hacia la medianería del altar. Aunque no era una tarea fácil la composición del espacio ya que los accesos debían ser por ambos frentes y perpendiculares al eje litúrgico, el arquitecto consigue reforzar la posición del altar mediante estos mecanismos.
Con la necesidad de albergar a más fieles se crea un graderío en voladizo que recorre el espacio longitudinalmente frente al altar y que termina en trazado curvo. A dicho graderío se accede mediante dos escaleras exentas ubicadas a ambos lados del mismo.
Las esculturas del interior son de Jose Luis Iriondo, franciscano.
Las fachadas exteriores se resuelven y componen de igual manera, mediante un pórtico de hormigón armado con cuatro vanos que se cierran con vidrieras obra del artista, también franciscano, Javier de Eulate. Los pilares con caras afacetadas que varían su sección y los arcos poligonales dotan al conjunto de un carácter escultural. La ausencia de ornamento simbólico hace que la iglesia se camufle entre los bajos del resto de viviendas.
Las esculturas del interior son de Jose Luis Iriondo también franciscano
20/03/2018
Las vidrieras con las que se resuelve la entrada de luz en las dos fachadas son creación del artista franciscano Javier Álvarez de Eulate (1919 -2012), que fue también el artífice de las vidrieras de la Basílica del Santuario de Aránzazu. Las piezas de vidrio fueron probablemente realizadas , como las de Aránzazu, en las vidrierías de Metz (Francia), empleándose después para su puesta en obra la técnica del hormigón translúcido o “mosaico transparente” como lo denominó el propio artista, técnica consistente en colocar las piezas –teselas- de vidrios gruesos de color incrustadas en el cemento.
Es destacable asimismo el órgano Amezua-Galdós.
Reseña de Román San Emeterio
06/06/2019
43.462724,-3.818283
Alonso Ortiz, Luis Alberto (2005) «Arquitectura religiosa en Cantabria. 1956-1970 cambio litúrgico y Modernidad», Curso de doctorado, Universidad Politécnica de Madrid.