Escuela Civil de la Marina
EDIFICACIÓN DOCENTE
Escuela Civil de la Marina
c) Severiano Ballesteros 14
Realizada en el año 1968 para dotar de sede permanente a la Escuela Oficial de Nautica, hasta entonces precariamente ubicada en el antiguo Hospital de San Rafael , esta obra de Angel Hernandez Morales contiene, dentro de su pequeño tamaño, muchos de los principios que se hicieron patentes a lo largo de toda su obra.
Arquitecturas amables, de volúmenes claros y soluciones sencillas, con lenguaje moderno pero sin renunciar a la tradición y siempre respetuosas e integradas en el lugar.
En este caso el programa se resuelve en un cuerpo principal, volumen prismático de dos plantas y semisótano con cubierta a dos aguas en el que se sitúan todas las funciones docentes y administrativas, y otro de menor tamaño que, replicando en su forma la tipología de nave industrial, alberga en su interior la zona de talleres.
En el proyecto original los dos cuerpos se enlazaban a través de una ligera pasarela acristalada y cubierta que dejaba intacta la percepción de ambos volúmenes sin interferir entre ellos , percepción que ha día de hoy ha quedado negativamente afectada por las desafortunadas ampliaciones que esta pasarela ha sufrido.
El volumen principal se abre a la Bahía de Santander a través de su fachada Sur en la que el ritmo vertical impuesto por la sucesión de pilares y huecos acristalados en toda la altura de las plantas se contrapone con la fuerte horizontalidad definida por las dos pasarelas que recorren toda la fachada a la altura de cada una de las dos plantas superiores.
Una tercera pieza de fuerte simbolismo, la torre o mástil para el radar, destaca en el conjunto por su estructura ligera y moderna y la elegante forma con la que se enlaza al cuerpo principal a través de la extensión de una de sus balconadas – pasarelas que se prolonga más allá de la propia torre y vuela sobre el espacio libre de parcela a modo de alerón del puente de mando de un buque.
Tres piezas independientes ,perfectamente articuladas entre sí , con un lenguaje formal lleno de simbolos (el taller industrial, la pasarela inferior que despega al edificio del suelo y anuncia la existencia del semi-sótano, el saliente de la pasarela superior como puente de mando , el mástil del radar ..), y con dos materiales, ladrillo pintado de blanco( recuerdos Aaltianos) en los dos edificios y hormigón visto en la torre, que a su vez representan la sencillez y dignidad de toda la obra.
Desgraciadamente comparando las imágenes del edificio original con las actuales se comprueba las sustanciales y negativas transformaciones que ha sufrido el edificio a lo largo de estos años.
El adosamiento de un volumen en planta baja para crear nueva entrada rompiendo el perfecto saliente que señalaba la escalera interior, el engordamiento y ampliación del pasillo de unión entre edificio principal y cuerpo de talleres ,la sustitución sin criterio de carpinterías, la aplicación de colorido en fachada, o la construcción de casetos exteriores que impiden la visión limpia del conjunto, son alguna de las desafortunadas intervenciones que han eliminado la claridad, limpieza y armonía de la obra inicial.
18/06/2019
En una ciudad tan ligada al mar y al puerto como Santander, el edificio para la escuela Civil de la Marina, ahora Escuela Náutico Pesquera de Santander tiene sin duda un marcado carácter simbólico.
Situado en el promontorio de San Martín comparte la primera línea de este espacio único con otros importantes edificios relacionados con el mar como el Museo Marítimo del Cantábrico o en Instituto español de Oceanografía.
El edificio está formado por tres piezas que forman un conjunto inherente. El edificio principal consta de dos plantas en las que se encuentran las aulas y un semisótano destinado a sala de máquinas. Un segundo cuerpo en planta baja que acoge los talleres y por último una alta torre donde se instala el radar y otros instrumentos de navegación.
De corte racionalista se constituye con formas rectas y ortogonales. El edificio principal abre los grandes ventanales de las aulas hacia la bahía y sus líneas se enfatizan con el uso del color azul en elementos estructurales que le da un aspecto marinero. En cada piso una balconada recorre la fachada de lado a lado con una barandilla que recuerda a las cubiertas de barco y que vuela en su segundo piso y conecta así con la torre del radar.
El cuerpo de planta baja en el que se encuentran los talleres es un rectángulo que se caracteriza por su cubierta en forma de diente de sierra abierto hacia el norte otorgando al interior la mejor iluminación para su función.
En su origen contaba con dos accesos, uno al sur situado en la conexión entre el edificio de aulas y los talleres, y otro en la fachada este, en la actualidad ambos accesos se encuentran en desuso debido a que ambos cuentan solamente con escaleras, ahora la entrada al edificio de realiza a través de un pequeño cuerpo añadido que mejoró a accesibilidad.
En un interior funcional de techos altos y pasillos anchos, cabe destacar el bloque de escaleras con un gran ventanal que lo llena de luz y el detalle de la barandilla a modo de barco que discurre de arriba abajo.
En definitiva, el conjunto destaca por su limpieza en la composición, la elegancia de las proporciones y el uso humilde del ladrillo pintado, que le aporta una interesante plasticidad.
19/03/2018
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VV.AA. (2010): «Equipamientos I. Lugares públicos y nuevos programas. Registro DOCOMOMO Ibérico, 1925-1965», Barcelona, Fundación Caja de Arquitectos.
fundación do.co,mo.mo_ibérico (2013). Disponible en: