Edificio Banco Vitalicio
RESIDENCIAL VIV. COLECTIVA
Edificio Banco Vitalicio
Calle Castelar 1. Santander
Gonzalo Bringas Vega
Adela Mazpule/1919
José Carrión Bermúdez
En 1919 Gonzalo Bringas Vega recibe el encargo para diseñar este edificio destinado a vivienda en alquiler. Gonzalo Bringas Vega nace en Laredo en 1980 y obtiene el título de arquitecto en 1906. Al año siguiente ganó el concurso de proyectos para la construcción del Palacio Real de La Magdalena, junto con su compañero de promoción Javier González de Riancho. El estilo del palacio, con reminiscencias inglesas, marcó sólo el brillante inicio de su prolífica trayectoria, que iría derivando hacia el eclecticismo y el regionalismo montañés.
La calle y alameda de Castelar construida en 1896 al norte de Puertochico hasta la fábrica de Gas, en Las Higueras, será la principal vía de comunicación entre Puertochico y la Avenida de la Reina Victoria y constituyó la culminación del proyecto de Alejandro Valle emprendido en 1885, iniciador del Ensanche hacia Oriente.
Como dice Ramón Rodríguez Llera, en su libro editado por el Ayuntamiento de Santander y la Librería Estudio en 1987, «Esta es una casa llena de histórico sentido burgués de la arquitectura, ese con que esta clase social tan distinguida acometía en algunas ocasiones la construcción de sus mejores casas de vecindad urbanas: resolución magnífica y agradable del programa, empleo de nada desdeñables materiales, pero sobre todo, y una vez resueltos los criterios tipológicos, interés vuelto principalmente a la fachada, en la cual se proclama un particular sentido del decoro, ya que este se entiende y se aplica en confusión con el término y concepto de prestigio.
Los bulevares parisinos habían dado la pauta. También los de Viena, Londres o San Sebastián. Aunque el ideal no se cumple en todas las ocasiones, existía una aquiescencia general que reglamentaba un estilo idóneo para cada destino funcional de los edificios, soluciones consideradas como las más óptimas. La Historia, en su sentido más amplio, ofrecía el respecto momentos de perfección álgida. En este organigrama de sabiduría reglamentada, el parámetro de estilístico de la casa de vecindad burguesa tiene precisamente en El Renacimiento su fundamentación más fuerte». «Esta casa se enmarca dentro, pues, de una ya entonces amplia experiencia, de la cual es clara continuadora. La ubicación es excelente, pero problemática. Con su rotundidad monumentalista, es la encargada de abrir la calle-paseo de Castelar, definiendo su primera visión, formando doble fachada principal, precisamente aquellas dos que crean el ángulo de partida señalado por la señal engrandecida del cuerpo-torre semicircular». «En su fachada principal sobre un paramento liso de fondo cuatro franjas ligeramente adelantadas llevan a cabo la ordenación de esta cara que mira al sur, a Puertochico. Entre estos cauces, se sitúan balcones semicirculares. El rito está clarificado en la misma iteración, sin tenerse tiempo para alcanzar el peligro de la monotonía. Entre otras causas, porque el edificio se ofrece finalmente como algo único».
24/02/2022