Colegio San Agustín
EDIFICACIÓN DOCENTE
Colegio San Agustín
Avda. de Pontejos 27
Ricardo Lorenzo García y Juan José Resines del Castillo
Comunidad de los R.R. P.P. Agustinos/1973
Mercedes Cobo Sánchez
La comunidad de los Padres Agustinos encarga a los arquitectos Ricardo Lorenzo García y José Resines del Castillo, la construcción de un complejo escolar en una zona de Santander donde no existía ninguna Unidad Escolar, para poder continuar con su labor docente en unas instalaciones mayores.
El proyecto alberga, además de las dependencias y anexos docentes, una iglesia y una residencia para los padres agustinos, la cual debe lo más alejada posible del resto, buscando una mayor independencia.
Dadas las características geométricas y físicas del solar se proyecta una construcción lineal en la dirección Este-Oeste, que tiene por objeto lograr la máxima longitud en su fachada Sur, unos 150m, a la que se abren la mayoría de las dependencias que se proyectan. En líneas generales puede decirse que las zonas de enseñanza se ubican en este cuerpo de edificación lineal, y que la capilla y la residencia se desarrollan en otro cuerpo de edificación que forman una «L» con el primero, al Este del conjunto, quedando esta zona más separada del resto.
En la construcción se definen claramente tres cuerpos de edificación escalonados en planta hacia en Sur, cuyo objeto es lograr que las zonas de trabajo y las dependencias más importantes tengan siempre una fachada al sur y otra al Este y al Oeste.
En planta sótano, además de almacenes y servicios generales, se sitúan los patios de recreo cubiertos, que quedan protegidos del viento Norte con una sencilla adaptación del terreno.
En líneas generales aparecen tres zonas diferenciadas por usos:
En la zona Oeste se sitúan las aulas, siempre organizadas por edades (los más pequeños en planta baja) y evitando mezclar locales de distintas áreas en las mismas zonas.
En la zona centro se colocan las dependencias dedicadas a trabajos y actividades comunes, como actividades técnico-profesionales, cafetería, comedor, sala de padres, salas de alumnos, etc., que, sin parecer incorporadas a una zona concreta, faciliten el acceso desde todas. Para proporcionar una buena iluminación en estos espacios amplios, se proyectan patios interiores, a modo de jardines, que creen un ambiente agradable y fresco.
Por último, en la zona Este, además de los despachos se sitúa la residencia de la comunidad y la capilla, que constituye una unidad arquitectónica en sí misma. La capilla está dividida en un pequeño espacio de culto para diario y un espacio mayor, separado con mamparas, que sirve de teatro. Ambas zonas unidas forman una capilla de tamaño adecuado para dar servicio a la zona residencial en la que se ubica el conjunto.
Es un proyecto que se desliga del neoclasicismo y regionalismo imperante, y que asume las teorías del Movimiento Moderno, con la horizontalidad como esquema básico de composición, la cubierta plana, la curva con un gran peso escultórico, la utilización de ladrillo caravista con gran valor expresivo y su flexibilidad para las nuevas formas, volúmenes macizos y vacíos, etc.
19/03/2018
43.478724,-3.792293
Porras, Fernando y Soriano, Federico (1990). » Ricardo Lorenzo 1927-89″. Colegio Oficial de Arquitectos de Cantabria, Cantabria, Circus, pg. 89 a 91.
Archivo municipal de Santander_ Legajos: 1164, nº 1 y nº2
Archivo del C.O.A.CAN.