CABEZÓN DE LA SAL "Territorio, desarrollo urbano y arquitectura"
1.- INTRODUCCIÓN
La exposición tiene por objeto principal mostrar como el hecho urbano actual es el resultado de un proceso de construcción a lo largo de la historia, acumulando por estratos superpuestos las transformaciones producidas o por extensión los desarrollos territoriales que han tenido lugar. Procesos históricos que se tratan de explicar en tres escalas articuladas entre sí, la del territorio, la del desarrollo urbano y la de la arquitectura de los edificios.
Para ello se han manejado tres documentos básicos elaborados en décadas anteriores, a los cuales remito a quien se encuentre interesado en estudiar este asunto con mayor detalle que el de estas breves notas. Estos documentos son los siguientes:
– Información Urbanística del Plan General, 1975-1981
– Libro “Casa y aldea en Cantabria”, 1991
– Libro “Cabezón de la Sal, tradición, cambio y futuro”, 2003. “El legado arquitectónico y urbanístico”, p. 167-197. Existe una bibliografía de consulta muy amplia que en gran parte se recoge en este libro sobre Cabezón de la Sal publicado el año 2003.
2.- APUNTES HISTÓRICOS
En este apartado se hace un recorrido destacando algunos de los hitos o de los acontecimientos conocidos que aportan referencias significativas en relación al proceso histórico de construcción de la villa y su territorio.
Si se contempla la documentación histórica existente, se comprueba que la ocupación del territorio se ha realizado -al menos desde el medievo hasta el siglo XX– de forma sistemática, a base de pequeñas agrupaciones de edificios, exentos o adosados, formando barrios y/o aldeas, distribuidas según un modelo preciso de organización y construcción del territorio, que ha conformado el sistema tradicional de asentamientos heredado, matriz de los desarrollos contemporáneos. Se puede por ello afirmar que no ha existido la dispersión y que el modelo de asentamientos era, y aún permanece en algunos lugares como Bustablado y Duña, de casas agrupadas formando barrios.
Se citan a continuación algunos de los apuntes históricos considerados más relevantes para el tema de la exposición:
Siglos I y IX, noticias de explotación minera de la sal.
Año 817, primera cita del Monasterio de San Martín de Tobía.
S. VIII-XI, Camino de los Foramontanos y de Liébana a Santillana del Mar.
Año 1085, Mención del Alfoz (territorio o valle) de Cabezón de la Sal.
Según Martínez Díez, en el año 1352, el valle estaba integrado por ocho aldeas, cada una de las cuales disponía de su propio término y de su concejo: Villa de Cabezón, Ontoria-Vernejo, Santibañez-Carrejo, Bustablado-Duña, Períedo con sus barrios de Casar y Cabrojo, Cos, Mazcuerras con sus barrios de Cohiño y Villanueva, El Concejón de Ibio con sus barrios de Sierra, Herrera, etc. Como se puede apreciar el valle formaba una unidad y es en la reforma administrativa del primer tercio del siglo XIX cuando se divide por el río Saja en los dos municipios que lo forman hoy día, Cabezón de la Sal y Mazcuerras. De este período se tiene noticia de la existencia de varias torres medievales, como la de los Guerra en Ibio, la de Fernández de la Reguera y la casa-tore de Ceballos en Cabezón de la Sal, la de Carrejo, las de Cos, etc.
En el año 1495 se emiten las Órdenes de construcción del puente de Santa Lucía y Camino Real por el valle del Saja.
Del año 1517 se tiene noticia del viaje de Carlos V, pasando por Treceño, Cabezón de la Sal, Los Tojos, etc. pernoctando a lo largo del recorrido.
Del año 1580 las Antiguas Ordenanzas de la Villa de Cabezón de la Sal.
Entre 1724-1729 se construye la nueva iglesia parroquial, por cierto, sobre unos huertos en los que existía un hórreo.
En 1757, según el Catastro del Marqués de Ensenada, existían nueve molinos, artesanos y comerciantes, numerosos arrieros dedicados al transporte de la sal, así como del trigo y vino desde Castilla para los comerciantes y los mercados locales semanales, etc.
En 1804 ya existen Escuelas en la actual biblioteca.
En 1856 la Real Compañía Asturiana de Minas se instala en Udías y Cabezón…
En 1867 se construye el Teatro Municipal con 150 localidades.
En 1889 se fundan Escuelas en donde hoy se encuentra ubicado el Ayuntamiento y en 1900 en Carrejo, ambas financiadas por D. Pedro Igareda Balbás. Igualmente el año 1908 se funda el Colegio del Sagrado Corazón en el Pernalejo, la Residencia de Ancianos y Escuela…, y también el año 1908 se funda por Dª Petra Igareda la Escuela de Comercio hoy Escuela Taller.
Año | 1591 | 1752 | 1900 | 1950 | 1981 | 2000 |
Población | 1.935 | 2.312 | 2.879 | 4.484 | 6.056 | 7.486 |
Nº de casas | 569 | 777 | 1.951 |
3.- LOS CAMINOS
Se mencionan algunos de los caminos o carreteras construidos por su importancia en la configuración del sistema urbano territorial, en su desarrollo o regresión, así como en la propia forma urbana de la villa y el resto de núcleos.
En Cabezón de la Sal aún hoy día puede observarse como la morfología básica de sus dos principales barrios, Salines y La Pesa, corresponde al modelo “alveolar”, en que solares, caminos y espacios públicos forman una trama urbana característica de nuestras aldeas tradicionales. De hecho, solo aparecen formas regulares formando calles en torno a las dos carreteras que cruzan la villa, y a la Avenida proyectada a la nueva estación del ferrocarril (1895-1937) .
En el cruce de los dos caminos principales se formó la plaza y en torno a ella se celebran los mercados semanales y localizan los principales edificios y actividades comerciales o de servicios (imágenes 7 y 8). Cruce de caminos y ejes del desarrollo urbano que a su vez hacen de Cabezón de la Sal cabecera y centro urbano comarcal, donde llega y se ubica la nueva estación del ferrocarril el año 1.895 (imagen 9), determinantes en el inicio del desarrollo industrial de la villa.
Entre los principales caminos cabe mencionar:
1800-1850, construcción de la carretera nacional 634 de Santander a Oviedo.
1868, construcción de la carretera comarcal, 1º a Saja y en 1896 hasta Reinosa (imagen 10).
1875-1896, construcción de la nueva carretera de Cabezón de la Sal a Comillas.
1895, ferrocarril Santander-Cabezón de la Sal y en 1905 a Llanes y Oviedo.
La villa de Cabezón de la Sal se construye en la encrucijada del eje este-oeste, Cantabria-Asturias y del norte-sur, Costa a Reinosa y la Meseta. Se consolida como la rótula que articula los territorios y valles interiores con el gran eje este-oeste, en donde la región perfila su desarrollo para los próximos siglos.
4.- DESARROLLO CONTEMPORÁNEO
Desde finales del siglo XIX, pero sobre todo a partir de los años 70 del pasado siglo, se producen una serie de hechos que marcan el desarrollo contemporáneo de la villa y con ello, un cambio en las formas de construcción y estilo en sus arquitecturas. Se pasa de un modelo tradicional agrupado, al desarrollo de nuevos procesos de extensión y dispersión, acentuados en las últimas décadas por el aumento espectacular de la movilidad individual basada en el uso generalizado del automóvil. Procesos que tienden a generar un desarrollo en “mancha de aceite” en torno a los caminos y a la congestión del núcleo central de la villa, donde se concentran la mayor parte de los servicios.
Cabezón de la Sal se ha convertido a lo largo del pasado siglo en un importante centro comercial, industrial y de servicios para amplias zonas del occidente de Cantabria. Esto ha supuesto un desarrollo urbano notable a partir del año 1.965, superados los problemas de los “hundimientos” provocados por la explotación de las minas de sal con nuevas técnicas. Se citan a continuación algunos de los hechos determinantes en su desarrollo urbano e industrial, la importancia de los mercados de ganado y de abastos, y su evolución reciente como cabecera y centro de servicios y de ocio comarcal.
Construcción de nuevas instalaciones en Las Salinas: 1870, 1895, 1920.
Construcción en el Sajón de la nueva central eléctrica: 1898
Construcción de la nueva red de distribución de agua: 1908
Construcción de nuevas fábricas de abarcas, madera, queso, cerámicas, etc.,
Construcción e instalación de nuevos servicios de hostelería, transporte, etc.
Construcción de la nueva fábrica de Textil Santanderina, inicialmente el año
1928, convertida en el motor de la economía y el desarrollo comarcal.
El período de postguerra enlaza con la época de “hundimientos”, hasta 1970.
A partir de 1970 hasta 2010 se produce un desarrollo urbano muy notable, pasando el municipio de 4.500 a 8.000 habitantes, en parte como resultado de la nueva política territorial de “cabeceras de comarca”, que supuso la concentración se servicios administrativos tales como educación, salud, etc.
Ello supone la llegada de nueva población y la construcción de numerosos edificios para usos de equipamiento y de vivienda.
Conviene recordar que en el año 2000 se hallan censadas 570 actividades empresariales, 65 profesionales 138 licencias comerciales, etc. Asimismo, que la construcción de la autovía entre 1995-2005 ha inducido el desarrollo de nuevas zonas industriales en la Venta de Ontoria, Virgen de la Peña-Casar de Períedo, Polígono de Navas, etc.
5.- EL PLANEAMIENTO
A partir del año 1900, con la llegada del ferrocarril, la construcción de la nueva avenida desde el centro de la villa a la estación y el inicio de un desarrollo urbano e industrial, se producen diversos intentos de ordenarlo de forma racional a través del planeamiento. La mayor parte de ellos son intentos fallidos, planos que se dibujan pero no llegan a ser tramitados como tales planes reguladores, hasta la llegada del Plan General de Ordenación Urbana cuya redacción se inicia el año 1975 y queda aprobado el año 1981. Este documento ha permitido, a grandes rasgos, servir para canalizar y ordenar el crecimiento de la villa y su municipio hasta su revisión el año 1997 y la aprobación del nuevo Plan General a finales del año 2013.
A continuación se hace un relato cronológico de los documentos conocidos:
-. 1908, año en que aparece fechado un plano topográfico con la nueva red de distribución de agua y algunas alineaciones de calles y edificios.
-. 1933, Ordenanzas de Edificación, impresas, con un plano de alineaciones.
-. 1941, Plano de Urbanización firmado por Valentín Lavín del Noval.
-. 1950-1955, Plan General elaborado por Ángel Hernández Morales, que propone un Ensanche de población en la zona de La Cabroja. Una ocasión perdida de ordenar el desarrollo urbano, anulada por los intereses particulares.
-. 1970-1975, Plano de alineaciones oficioso, sin tramitar, seguido en parte.
-. 1975-1981, Elaboración y aprobación del Plan General de Ordenación.
-. 1996-1997, Revisión del Plan General y aprobación de Normas Subsidiarias.
-. 2000-2013, Elaboración y aprobación de un nuevo Plan General.
Cabezón de la Sal debe decidir cómo ordenar sus procesos futuros, sentar las bases del modelo económico y social, que sirva de referencia para regular su desarrollo territorial en la construcción del futuro como ciudad, de una “pequeña gran ciudad”. Para ello tiene que resolver tres problemas básicos, como son la variante del ferrocarril con sus “pasos a nivel”, la variante de tráfico hacia el valle de Cabuérniga y las inundaciones fluviales. El problema del ferrocarril es crucial, ya que constituye una barrera que constriñe la villa dentro de un perímetro urbano ya agotado y condiciona sus desarrollos en torno a los ejes viarios que articulan el centro de la villa con Carrejo y Ontoria y Vernejo, motivado por el estrangulamiento que suponen los pasos a nivel.
Solucionar estos grandes problemas resulta imprescindible para diseñar sin “corsés” un futuro urbano con calidad, pero esto depende de otros estamentos administrativos, con marcos jurídicos y financieros propios, ante los cuales el conjunto de la comunidad y sus representantes han de plantearlos y resolverlos.
6.- PAISAJE, PARQUES Y JARDINES
Para finalizar esta exposición se hace un breve repaso sobre algunos de los hechos más significativos en relación al paisaje y valorar así su importancia en el conjunto de las transformaciones territoriales y urbanas.
Se produce una deforestación temprana, principalmente de los bosques de robles, con el objeto de abastecer a las ferrerías, de conseguir madera para la construcción naval y de edificios, y en particular para suministrar combustible a los hornos de las salinas, proceso incrementado en los siglos XVIII y XIX.
Entre 1900 y 1950 se produce un cambio del modelo ganadero hacia un sistema de ganadería intensiva, estabulada, para la producción láctea. Con ello se producen nuevas transformaciones en el paisaje, con la aparición de los caseríos, el destino de las mieses a praderías y la concentración parcelaria.
A partir del año 1941 se inicia una transformación fundamental, con la desaparición de las masas forestales de bosques autóctonos en las tierras bajas, y la plantación sistemática de eucaliptos y pinos, esto produce otro paisaje y la degradación de laderas, desaparición de fuentes y manantiales tradicionales, de pastos y recogida de leña, de fauna, aumento de la escorrentía del agua y con ello de las inundaciones, etc. Como ejemplo de ello pueden verse las imágenes de La Brañona, antes y ahora, de la zona de Pontonillas, de las laderas del Escudo en las zonas de Santibañez y San Cifrian, etc.
A partir del año 1983 se inician las obras de encauzamiento del río Saja, lo
cuál, junto con las transformaciones producidas por la concentración parcelaria supone otro cambio fundamental en el paisaje agrario de la mieses y del valle.
Entre 1970 y el año 2010 se producen cambios sustanciales por un desarrollo urbano extensivo y la construcción de nuevos barrios residenciales, viviendas aisladas o naves en zonas dispersas, polígonos industriales, la autovía, etc.
Y finalmente destacar la importancia que en el paisaje urbano adquieren los numerosos parque y jardines que jalonan la trama urbana y el marco territorial, tales como el Ferial de La Losa, el Pico de la Torre, la Quinta San Diego, el Centro de Estudios Rurales en La Pesa, el Jardín de Carrejo, el de Jesús de Monasterio en Casar, o espacios como el Bosque de Secuoyas, la Campa de Santa Lucía, el Minchón en Ontoria y los nuevos caminos en torno al río Saja, con capacidad potencial de configurar un gran parque territorial de más de 50 hectáreas, articulando dos partes del valle ahora separadas por el río.
7.- ARQUITECTURAS
En el municipio existen conjuntos de arquitecturas construidas en los últimos siglos, con edificios de gran valor que representan lo mejor de cada época y de los diversos modelos y tipos. Ellos son la base del sistema urbano construido, donde predominan tipos que se repiten de forma sistemática junto a ejemplos singulares característicos, que enriquecen y diversifican el entramado urbano.
La mayor parte de esas arquitecturas han llegado hasta el presente después de un largo proceso histórico, lo que ha supuesto reformas y transformaciones en la mayoría. Se adjunta un cuadro gráfico que muestra una síntesis de los tipos correspondientes a las arquitecturas domésticas en el municipio de Cabezón de la Sal, donde se puede contemplar la riqueza y variedad de ejemplos aún presentes en la villa y sus aldeas.
Restos tan notables como los de las torres medievales de los Ceballos y la de los Fernández de la Reguera en Cabezón de la Sal, o los de la torre de Carrejo, se encuentran diluidos y/o semiocultos por las transformaciones producidas en sus solares, donde habitualmente se han construido casas-palacio adosadas a los muros de la vieja torre, pero las portaladas y otros restos defensivos han desaparecido, como cita el año 1691 el cronista de Carlos II, Francisco de Sota acerca de la torre de los Fernández de la Reguera situada en la Plaza de San Pedro del Barrio de La Pesa: “está derruida su fuerte torre cercada de fosos…”
En el último tercio del siglo XIX sobresalen los edificios financiados por la familia Igareda en estilo neogótico –Colegio del sagrado Corazón y Asilo de Carrejo- y el chalet del Conde de San Diego en estilo suizo-alpino (1900), hoy Casa de Cultura. Mención especial merece la presencia durante los veranos de L. Torres Balbás que tenía casa propia en la villa por parte de su madre (imagen 26) PIE Casa de la familia de L. Torres Balbás. En la casita de la izquierda veraneó el arquitecto, el cual construye una de sus primeras obras, pequeña pero excelente. Es el Panteón de sus tíos los Condes de San Diego (imagen 27), en el cementerio municipal. Igualmente destacable es el antiguo teatro municipal, en ruinas y derribado los años 60 del pasado siglo, con obra en su interior de los artistas María Blanchard, Benlliure y Cesar Abín.
Finalmente destacar a su vez la numerosa obra en la villa del arquitecto Javier González Riancho, cuya esposa María Serna era de Cabezón de la Sal, y quizás por ello proyecta y construye varias villas y edificios entre 1909 y 1934. En menos medida también existe obra notable de los arquitectos Lavín Casalís, Lavín del Noval…, referida a la construcción de casas unifamiliares y de pisos, entre 1900 y 1936. Las arquitecturas construidas en las últimas décadas constituyen un tema específico para otro curso.